sábado, 30 de diciembre de 2017

FELICIDADES A DON JOSÉ COBO, JESÚS VIDAL Y SANTOS MONTOYA, NUEVOS OBISPOS AUXILIARES DE MADRID

El arzobispado de Madrid ha hecho público el nombramiento de tres obispos auxiliares para la archidiócesis de Madrid. Entre estos está José Cobo que era, en la actualidad, el vicario de la Vicaría II de Madrid donde se encuentra ubicada nuestra casa de Ferrer. Se le ha asignado la sede titular de Beatia (Baeza, Biatien-sis), que tenía como metropolitana a Sevilla.

José Cobo
El recién nombrado obispo auxiliar de Madrid José Cobo Cano nació en Sabiote (Jaén) el 20 de septiembre de 1965. Es licenciado en Derecho por la Universidad Complutense de Madrid y entró en el seminario de Madrid en 1988. También realizó los estudios de Ciencias Morales en el Instituto Redentorista, vinculado a la Universidad de Comillas. El 23 de abril de 1994 fue ordenado sacerdote.


José Cobo ha sido una persona muy cercana al trabajo de campo, de los grupos, de los arciprestazgos, de los sacerdotes. Desde esta página le queremos FELICITAR y rezamos para que su trabajo lleve a la Iglesia a vivir en salida misionera y samaritana. 

los tres nuevos obispos

Junto a él han sido nombrados dos obispos más Jesús Vidal, rector del Seminario de Madrid entre otros cargos y Santos Montoya  que es natural de La Solana (Ciudad Real) y donde pasó su infancia hasta que sus padres se trasladaron a Madrid, En la actualidad era el Párroco de la Parroquia de la Beata María Ana de Jesús. Para ambos nuestras  felicitaciones y auguramos también lo mejor para su nueva tarea pastoral.

Felicitaciones al subdirector de las OMP D. José María Calderón

El 28 de diciembre fue nombrado como Subdirector de las OMP el que sigue siendo Delegado diocesano de misiones y Director diocesano de las OMP de Madrid D. José María Calderón. Desde esta página queremos felicitar el nombramiento como Subdirector de las OMP que seguro estamos aliviará al actual director D. Anastasio Gil de muchos trabajos y compromisos. Desde esta Institución misionera del IEME seguimos en disposición de trabajar conjuntamente con él en el trabajo misionero que desarrollan las OMP.

El nuevo subdirector D. José María Calderón ha estado vinculado siempre y vivido experiencias misioneras en varios continentes.  En calidad de su cargo como Director diocesano OMP estaba incorporado a comisiones económicas internacionales de las OMP en Roma. En la toma de su cargo expresó: "Doy gracias a Dios por haberme dado la oportunidad de conocer la labor de los misioneros españoles en el mundo. Me impresiona la grandeza de ánimo, el espíritu de sacrificio y la alegría por llevar a Jesús a quienes aun no lo conocen".

miércoles, 13 de diciembre de 2017

CATEQUISTAS MISIONEROS, ESPERANZA DE LA IGLESIA

En la Jornada misionera de 1980, hace ya 37 años se escribía la siguiente reflexión en torno a este título que precede y que era el lema de aquel año:



"El catequista o animador de la comunidad fue una figura clave en la evangelización de muchos países. Su bicicleta recorrió los más remotos poblados de la selva. Su lengua repitió incansablemente a cientos de hombres y mujeres lo más esencial del mensaje cristiano. Su dedicación desinteresada y su celo, aun en las más grandes dificultades y peligros, arrastraron a mayores y niños hacia la fe cristianan.

El catequista instruía, visitaba a los enfermos, preparaba a quienes iban a recibir los sacramentos, presidía las celebraciones de la palabra y era el mediador entre el misionero y los cristianos.

La remodelación de la Iglesia local como comunidad de fe y de acción con ministerios propios ha multiplicado los catequistas. Hoy empiezan a ser fruto de la propia comunidad a la que sirven. Es así como la comunidad se engendra, crece y fortalece.

El objetivo es claro: que cada comunidad cristiana esté dotada de sus propios anunciadores y formadores de la fe. El catequista de antes, venido de fuera, anunció la fe que desembocó en comunidad. El catequista de hoy anuncia desde la joven comunidad la fe que se hace vida y crece.

domingo, 10 de diciembre de 2017

EL IEME CON EL PIE EN EL PRESENTE Y LA MIRADA EN EL FUTURO

Año tras año os hemos ido dando a conocer distintas facetas del IEME: de lo que somos y de lo que queremos ser; de nuestros trabajos en la misión fuera de nuestras fronteras y de nuestra tarea de animación misionera aquí en España, de nuestros sueños y nuestras esperanzas (también de nuestras dificultades y limitaciones). Hemos dejado muy claro que nuestra iglesia española y todos nosotros, como bautizados, somos y tenemos que ser misioneros. Nos lo dice jesús en el evangelio, nos lo ha dicho el Papa cada rato y nosotros lo sabemos muy bien. ¿Lo creemos y lo vivimos? Ese es otro cantar…


Nosotros, los sacerdotes misioneros del IEME, somos una cara visible de esa iglesia misionera (otras caras son los/as religiosos/as, los laicos). Y no queremos repetir sin más, hacer lo mismo siempre. Por supuesto que lo esencial no cambia: anunciar la Buena Noticia del Reino, con obras y palabras, especialmente a los pobres, como lo hizo Jesús (Lc 4, 16-21). Somos muy conscientes de estar no sólo en una época de cambios (y muy rápidos) sino en un “cambio de época”, donde todo se replantea. Ello nos obliga a reflexionar, evaluar, cambiar, convertirnos…


Afortunadamente, en el IEME tenemos establecida una Asamblea General cada 5 años. Y este año, 2018 en mayo, nos toca hacerla. Nos reuniremos representantes de todos los países donde estamos trabajando, más los de España, para preguntarnos con sinceridad: ¿dónde estamos? qué estamos haciendo? cómo lo estamos haciendo?... Y, sobre todo, sí es eso lo que el Señor nos pide, si es eso lo que hoy necesitan los pueblos y las iglesias donde trabajamos. Y adelantarnos al mañana.


No cabe duda de que es importante que tengamos bien puestos los pies en el presente (en el mundo de hoy y en la Iglesia de hoy, la que nos dibuja cada día el papa Francisco). Y es importante que pongamos la mirada no tanto en el pasado sino en el futuro: lo que queremos ser y hacer, lo que Dios espera de nosotros y aquello a lo que tienen derecho a esperar los pueblos a los que somos enviados.
Desde ahora os agradecemos vuestras oraciones para que acertemos en nuestra Asamblea General de este año. Somos menos y mayores cada vez, pero eso no nos exoneran de tratar de ser mejores, de trabajar cada día mejor. Y “si el Señor no construye la casa en vano se esfuerzan los albañiles” (Sal 127). Que Él nos eche una mano. Por adelantado, nuestra gratitud a vosotros.


ASOCIACIÓN AMIGOS DEL IEME

Ayer sábado día 9 de diciembre, la Asociación de Amigos del IEME tuvo su encuentro anual de San Francisco Javier. 

 Nos reuníamos alrededor de unas cincuenta personas entre amigos y miembros del IEME.  Este encuentro es como en cada ocasión un momento para afinar la memoria, regocijarse en los recuerdos, saborear la amistad, vivir aun experiencia de fe y pasárselo lo mejor que se pueda. 


Los asociados fueron llegando alrededor de las diez de la mañana, matrimonios, "singles", según estado. Se tuvo un primer encuentro-asamblea donde se  presentaron las personas que aún no se conocían, se dieron informes, se habló de las actividades de la asociación a lo largo del curso, se abrieron diálogos y se terminó con la exposición-enfoque de la Jornada de catequistas nativos y del IEME. La Asamblea estuvo presidida por Angel Sainz, presidente de la Asociación.


Tras este momento necesario se pasó a la Eucaristía que había sido preparada en sus cantos exquisitamente. Misa de Angelis recordando viejos tiempos, aunque las voces no estaban tratadas tan finamente como en otros tiempos. Una eucaristía que presidió José María Rojo y concelebraron Isidoro Sánchez y Ángel Becerril.


Tras la misa, la Mesa y tras la mesa una sobremesa sabrosa de cantos, bailes, chistes y actividades que se remontaban a los viejos tiempos de Burgos y otras actividades más modernas. Buen ambiente, buen rollo y todos tan contentos.








miércoles, 6 de diciembre de 2017

¡No nos dejemos robar el espíritu misionero!

Hace ni más ni menos que 35 años (1982) (algunos de los que escribimos esto no habíamos sido ordenados aún) se escribía la siguiente reflexión:

“-`¿Ir a misiones?´
-“No es el momento”, se piensa. Y luego, la tan sabida frase: “Bastantes misiones tenemos aquí” o la otra respuesta que parece más cristiana: “Van a tener que venir desde allá a misionarnos a nosotros ¿quién sabe?

En cierto modo, aquellas iglesias jóvenes y misioneras, con sus animadores y catequistas de comunidad, su testimonio sencillo, y hasta sus persecuciones y mártires, nos devuelven ya el evangelio como más vivo y comunitario. Este intercambio, diálogo y el “contar entre hermanos las maravillas que el Señor obra en otros pueblos”, tal como lo hacían los Hech 15, 3-4, es parte importante de la Misión. Para vivirla en plenitud la Iglesia es misionera, sale se abre a otras culturas y escucha allí “las semillas del Verbo”, nos dice el Vat. II


La Misión es una exigencia vital del Evangelio, es de lo más institucional en la Iglesia de Jesús. El miedo, la tal prudencia “humana” nos cierran el horizonte y con frecuencia nos paralizan. Cierto que vivimos tiempos de crisis, esperas y búsquedas. Pero lo que ya parece poco evangélico es que nos busquemos salidas a base de seguridades, intereses, muy privados y vueltas hacia atrás. “Desde la fe” las salidas son siempre hacia adelante, hacia un mayor riesgo y entrega y generosidad.

Queriendo revitalizar nuestra Iglesia de España no podemos encerrarnos en nosotros mismos diciendo: “Dios les guarde, hermanos, se las vayan arreglando” ¿Todo lo contrario!


Ir  a los más pobres, a los otros, esa es la opción preferente en el Evangelio de Jesús…..”Y así,  después de 35 años el Papa Francisco vuelve a reflexionar en los mismas claves, quizás con otras palabras.. “la alegría del evangelio llena el corazón y la vida entera de los que se encuentran con Jesús” “Ser Iglesia en salida” abandonando la “autorreferencialidad”,  abrirse a los desafíos de hoy, las tentaciones de los agentes e Iglesia que sumergen la actividad misionera en una crisis de miedo y desesperanza….y se permeabiliza en una crisis espiritual misionera. 

¡No nos dejemos robar el espíritu misionero!

SAN FRANCISCO JAVIER 2018

El 2 de diciembre hemos vivido en nuestra casa de Ferrer la fiesta deL PATRÓN DEL IEME  San Francisco Javier. 


Ha sido una fiesta sencilla y con un grupo del IEME que se ha desplazado hasta Madrid a pesar de ser una fecha algo incómoda por ser  sábado y comienzo de adviento. Quien estaba más vinculados a parroquias ha sido una combinación algo difícil. 


Instituciones misioneras y religiosas nos han acompañado en un  día que pretendía apiñarnos quienes sentimos la misión ad gentes como experiencia vinculante de nuestro hacer y sentir.

  Presidió la Eucaristía el director general, aunque con él estuvo el obispo D. Ángel Floro, obispo dimisionario de Zimbabue, pero que la operación que sufría de la muñeca le impidió que fuera él quien la presidiera. Acompañando también la presidencia  concelebraba D. Amadeo, el vicario general de pastoral de la región sur de Lima.  Se centró el presidente en hilar una reflexión que enlazaba la tarea misionera del clero diocesano y del IEME en el momento de surgir como Institutto misionero, con la realidad actual de impulsar la tarea ad gentes desde las claves en que se sitúa la reflexión actual del papa Francisco.

Como todos los años, tras la misa la mesa a la que nos acompañaron todos los amigos y amigas que nos acompañaban en la Eucaristía. En ese clima de amistad, sencillez y experiencia de fraternidad misionera se fue desdibujando la tarde que volvía a las faenas de cada día,



martes, 5 de diciembre de 2017

El Papa, Myammar y OMP

El Papa Francisco, durante su viaje apostólico en Myanmar, expresaba su agradecimiento a las Obras Misionales Pontificias. Gracias a “la generosa asistencia proporcionada por las Obras Misionales Pontificias – decía el Santo Padre – la Iglesia en este país está ayudando a un gran número de hombres, mujeres y niños, sin distinción de religión u origen étnico”.


Lo decía durante la homilía de la Misa que ha celebrado hoy en el Kyaikkasan Ground, en Rangún, la antigua capital del país. “Muchos de vosotros habéis venido de lejanas y remotas tierras montañosas, algunos incluso a pie. Vengo como peregrino para escuchar y aprender de vosotros, y para ofreceros algunas palabras de esperanza y consuelo”. Y les ha hablado de la cruz – la verdadera sabiduría del Señor –, de curación, del bálsamo saludable de la misericordia.

“Sé que la Iglesia en Myanmar ya está haciendo mucho para llevar a otros el bálsamo saludable de la misericordia de Dios, especialmente a los más necesitados. Hay muestras claras de que, incluso con medios muy limitados, muchas comunidades anuncian el Evangelio a otras minorías tribales, sin forzar ni coaccionar, sino siempre invitando y acogiendo. En medio de tanta pobreza y dificultades, muchos de vosotros ofrecéis ayuda práctica y solidaridad a los pobres y a los que sufren. Con el servicio diario de vuestros obispos, sacerdotes, religiosos y catequistas, y en particular a través de la encomiable labor de la Catholic Karuna Myanmar y de la generosa asistencia proporcionada por las Obras Misionales Pontificias, la Iglesia en este país está ayudando a un gran número de hombres, mujeres y niños, sin distinción de religión u origen étnico. Soy testigo de que la Iglesia aquí está viva, que Cristo está vivo y está aquí con vosotros y con vuestros hermanos y hermanas de otras comunidades cristianas”.

La ayuda de las Obras Misionales Pontificias a la Iglesia de Myanmar ha estado presente año tras año, durante decenios. La Iglesia universal y católica se hacía presente y cercana a la Iglesia de Myanmar con estas ayudas, que este año 2017, han ascendido a 1.498.500 dólares. Un dinero que, como ha dicho el Papa, ha ido a apoyar a las casi mil instituciones educativas y sociales de la Iglesia, que van desde colegios a residencias de ancianos, por leproserías y orfanatos, que muestran el compromiso de todas y cada de las 16 diócesis de Myanmar por estar cerca de los más necesitados de la sociedad.


Obras Misionales Pontificias extienden este agradecimiento del Papa a todos los donantes que colaboran con el DOMUND, con Infancia Misionera y con la Obra Pontificia de San Pedro Apóstol.
(Fuente: Obras misionales Pontificias)

miércoles, 29 de noviembre de 2017

CONSTRUCTORES DE COMUNIDAD

La sorpresa fue muy grande para mí: En todos los poblados (más de cien) de la inmensa parroquia que se nos había encomendado al sur del país, los cristianos celebraban en la mañana de cada domingo el Día del Señor. ¡Admirable¡ ¿Y cómo se las arreglan con sólo dos sacerdotes para garantizar la celebración del domingo por todos los rincones? 
  


El catequista (delegado de la Palabra se le llama en América Latina) acoge a la comunidad cristiana de su lugar que se dispone para la celebración. Llegan los lectores con su Biblia y las lecturas repasadas previamente para proclamarlas con claridad a la asamblea. Y los músicos y cantores con sus guitarras e instrumentos... La asamblea se va congregando, se saludan unos a otros y se disponen a celebrar el Día del Señor: se canta, se escucha la Palabra de Dios, se acoge con atención el comentario sencillo del catequista, se alimentan en la comunión cuando disponen de ella, se dan los avisos y se toman los acuerdos para la semana. En las otras capillas evangélicas del poblado también se congregan sus cristianos. ¡Es el Día del Señor!

En gira por las comunidades


La Palabra proclamada, acogida y celebrada en el domingo se desgrana en vida en Dios durante la semana: los ancianos y enfermos son visitados y se ora con ellos en sus casas, los niños y jóvenes tienen su catequesis, los responsables se reúnen para preparar la celebración siguiente y para dar seguimiento a las tareas de la comunidad. Son ellos (catequistas delegados de la Palabra los que cuidan y garantizan día a día la marcha de la comunidad. Una vez al año llega el sacerdote y se tienen la eucaristía, los bautismos y las bodas, si las hay. Y el aire de fiesta es aún mayor ese día.
Catequistas en panga por los ríos de Nicaragua

La iglesia en los lugares de misión gasta sus principales energías en formar responsables de las comunidades (catequistas o delegados de la Palabra); los reúne una o dos veces al año para capacitarlos en cursos y talleres y les acompaña en su vida de fe. Ellos son cristianos adultos y ejemplo de fe y de vida creyente: ¡CATEQUISTAS CREADORES DE COMUNIDAD!  

P. Janín con un catequista en Togo


Lo que sentimos sobre ellos lo retrata con acierto el cartel editado para esta Jornada Misionera de Epifanía: una comunidad reunida y asentada sobre la Palabra de Dios, que le va dando forma de corazón, haciéndole sentir que es portadora de la ternura de Dios derramada sobre ella y la envía a derramar ese amor sobre los pequeños y los pobres siguiendo a Jesucristo que está entre ellos (es a la cruz hacia la que todos orientan su mirada). Esa es la COMUNIDAD cristianas que cada CATEQUISTA se esfuerzan en CREAR con el impulso que viene del Espíritu.  

Reunión de catequistas en Tailandia




martes, 28 de noviembre de 2017

Animador-catequista


Como seglares itinerantes de dedicación plena a la iglesia local, suscitan en las comunidades diferentes servicios, alientan y forman a quienes los ejercen, median en los conflictos, ayudan a solucionar dificultades internas de la comunidad, participan activamente en el trabajo social y en la pastoral de la zona.


El animador-catequista es hoy un evangelizador de una iglesia local que va siendo comunidad de comunidades, familia de familias. Con su servicio de consejo y apoyo contribuye decisivamente a que la comunidad cristiana se consolide. A través de él, la pequeña comunidad se asoma a la iglesia zonal y universal.


Este pastor cercano e itinerante, hermano entre los hermanos, que con su fe engendra fe, necesita un cuidado especial: no sólo una remuneración digna, sino ante todo atención espiritual y familiar acompañada de una sólida formación permanente. (de la reflexión de la Jornada de Catequistas de 1982)

FELICIDADES CHARI


Muchas felicidades Chari, te deseamos todo lo mejor, para tí y tu familia. Te agradecemos tanta y tanta amabilidad, disponibilidad, servicio, sencillez, ternura...discreción. Ojalá estuviéramos a la altura de las circunstancias al agradecer no sólo estas cualidades tuyas tan evidentes sino también tu profesionalidad en este servicio que haces y has venido haciendo al IEME y a la Misión durante tanto tiempo. La primera foto, aunque más jovencita, revela también tu corazón. Gracias. Gracias a Juanje y a tus hijos también.









lunes, 27 de noviembre de 2017

SERVIDORES DE LA COMUNIDAD

Sí, parece que fue ayer, pero hace 35 años la Jornada de Epifanía tenía como lema este título: Servidores de la comunidad. 


En la reflexión de aquel año se hacía referencia a unas palabras del Cardenal Malula, en su carta del Centenario de la Segunda Evangelización del Zaire, decía " Un laicado mayor de edad y responsable tenía que ocupar su puesto  en la Iglesia tan predominantemente clerical de la época misionera. Tareas de responsabilidad que antes eran exclusivas del clero, hoy son asumidas y realizadas muy bien por los laicos. Surgen ministerios nuevos a impulsos del Espíritu del Señor".

Como vemos son palabras todavía muy actuales y todavía tarea que realizar. "Los catequistas-seguía la reflexión- como los misioneros son artesanos de la comunidad. A ella dedican lo mejor de sus vidas. El testimonio de su fe, tal vez sencilla, pero profunda y sólida, se concreta a menudo en el servicio a los hermanos.

Artesanos de la esperanza y entusiasmo que hoy nos ofrecen las iglesias jóvenes. El catequista es un sembrador de esperanza entre su gente porque la Buena Nueva es noticia de esperanza y de liberación.

¡Qué generosidad de estos laicos/as, cuánto de agradecer  que han creado comunidades cristianas y no han reivindicado ninguna autoridad ni privilegios! Inspirados /as por el Espíritu han sido creadores anónimos  de comunidades creyentes.

martes, 21 de noviembre de 2017

CREADORES DE COMUNIDAD. JORNADA DE CATEQUISTAS NATIVOS Y DEL IEME

La sorpresa fue muy grande para mí: En todos los poblados (más de cien) de la inmensa parroquia que se nos había encomendado al sur del país, los cristianos celebraban en la mañana de cada domingo el Día del Señor. ¡Admirable¡ ¿Y cómo se las arreglan con sólo dos sacerdotes para garantizar la celebración del domingo por todos los rincones? El catequista (delegado de la Palabra se le llama en América Latina) acoge a la comunidad cristiana de su lugar que se dispone para la celebración. Llegan los lectores con su Biblia y las lecturas repasadas previamente para proclamarlas con claridad a la asamblea. Y los músicos y cantores con sus guitarras e instrumentos... La asamblea se va congregando, se saludan unos a otros y se disponen a celebrar el Día del Señor: se canta, se escucha la Palabra de Dios, se acoge con atención el comentario sencillo del catequista, se alimentan en la comunión cuando disponen de ella, se dan los avisos y se toman los acuerdos para la semana. En las otras capillas evangélicas del poblado también se congregan sus cristianos. ¡Es el Día del Señor!


La Palabra proclamada, acogida y celebrada en el domingo se desgrana en vida en Dios durante la semana: los ancianos y enfermos son visitados y se ora con ellos en sus casas, los niños y jóvenes tienen su catequesis, los responsables se reúnen para preparar la celebración siguiente y para dar seguimiento a las tareas de la comunidad. Son ellos (catequistas o delegados de la Palabra los que cuidan y garantizan día a día la marcha de la comunidad. Una vez al año llega el sacerdote y se tienen la eucaristía, los bautismos y las bodas, si las hay. Y el aire de fiesta es aún mayor ese día.


La iglesia en los lugares de misión gasta sus principales energías en formar responsables de las comunidades (catequistas o delegados de la Palabra); los reúne una o dos veces al año para capacitarlos en cursos y talleres y les acompaña en su vida de fe. Ellos son cristianos adultos y ejemplo de fe y de vida creyente: ¡CATEQUISTAS CREADORES DE COMUNIDAD!  



Lo que sentimos sobre ellos lo retrata con acierto el cartel editado para esta Jornada Misionera de Epifanía: una comunidad reunida y asentada sobre la Palabra de Dios, que le va dando forma de corazón, haciéndole sentir que es portadora de la ternura de Dios derramada sobre ella y la envía a derramar ese amor sobre los pequeños y los pobres siguiendo a Jesucristo que está entre ellos (es a la cruz hacia la que todos orientan su mirada). Esa es la COMUNIDAD cristianas que cada CATEQUISTA se esfuerzan en CREAR con el impulso que viene del Espíritu.   





domingo, 19 de noviembre de 2017

LA ACCIÓN SOCIAL DE LA IGLESIA

Entre los días 17-19 de noviembre ha tenido lugar en la Universidad CEU San Pablo del Campus de Montepríncipe y de Moncloa el XIX Congreso Católicos y vida pública.  El Congreso ha girado en torno a La Acción social de la Iglesia. Una Iglesia sin caridad no existe se hacía eco el Congreso de estas palabras del Papa Francisco y más aún coincidiendo con la celebración de la 1 Jornada mundial de los Pobres. 


El Congreso ha  querido manifestar una idea latente y es que la experiencia de fe no es aquella recluida entre las paredes de los templos, sino la que ha configurado verdaderamente el rostro de la caridad a través de las obras. El papa ha titulado precisamente la Jornada mundial de los pobres con esta idea "No amemos de palabra sino con obras". La Iglesia a través de una infinidad de organizaciones, congregaciones y actividades sociales ha  mostrado desde siempre "su verdadero rostro en su constante preocupación del ser humano y por la sociedad que le rodea" con una mirada preferencial por los pobres. Instituciones como Cáritas, Manos Unidas, Obras misionales pontificias, AIN...por citar algunas han querido ser expresión de una Iglesia conmovida por el dolor, la indignidad y el descarte del ser humano. 


El Congreso se ha desplegado a través de ponencias, mesas redondas de experiencias solidarias surgidas muchas de ellas desde el campo de la profesionalidad con corazón cristiano. Se han ofrecido experiencias existenciales que ha recorrido diversas realidades sufrientes, el mundo del trabajo, de la empresa, de la cultura y el arte, pasando por la obra social del ejército, cárceles, etc , etc  se han dado cita en este Congreso. El Congreso ha tenido una extensión comprensiva jóvenes, adolescentes e infancia allí presente también.


El domingo 19 tiene lugar la clausura del Congreso con la celebración de la misa presidida por el cardenal de Madrid Mons. Carlos Osoroen la capilla del Campus de Moncloa y la participación de personalidades carismáticas como Mons Kike Figaredo, prefecto de la Prefectura Apostólica de Battambang, Camboya.


El Director del Departamento de Información y Animación misionera ha tenido ocasión de hacerse presente a través de las OMP y ayudado en la exposición del trabajo de las Obras misionales pontificias







miércoles, 1 de noviembre de 2017

UN CIELO NUEVO, UNA TIERRA NUEVA

Innumerables los hombres y mujeres que han dado testimonio ante el mundo de perdón, de misericordia, de humildad y compromiso por una tierra más justa, más pacífica, de mayor concordia y comprensión, de superación de todo aquello donde los odios rompen la cordura y sensatez humana.
Ruidera
 Lo han realizado por su amor a Cristo y por su amor a los hombres y mujeres de este mundo. En esta empresa han ofrecido su vida y muchas hasta con su muerte. A algunos se les ha reconocido su santidad y a otros se le ha añadido a la comunión de los santos. Algunos han trabajado tras mesas de oficinas, o subidos a los andamios de una obra, con el casco de obrero de un trabajo, enseñando en aulas o encorvados sobre la tierra esperando sus frutos, entregando su vida a sus familias o exponiendo su vida en lugares adversos, otros entregando su vida a sus hermanos sin importarles naciones, razas, tribus, lenguas o territorios…
Son santos porque ellos vivieron y amaron sin egoísmos, sin rencores, sin odios, sin codicias, renunciaron a un mundo de vida centrada en ellos mismos para des-centrarse en los otros, especialmente en los necesitados, marginados, descartados de este mundo. Escogieron ser mansos más que arrogantes y descarados, vivir con una pobreza interior más que llenarse de soberbia, ser y trabajar por lo justicia, más que esconder su vida en el cinismo y la doblez, ofrecer a Dios la pureza de sus corazones, seguros de que su recompensa está escondida en el reino de Dios.
          Las lecturas de hoy son una invitación a unirnos a esta empresa, a esta mesnada de “locos” por Dios. Verdad es que es empeño y voluntad de Dios salvarnos, pero con actitudes como la de los santos también salvamos a nuestro mundo. Es una invitación a ir más allá de la supervivencia. Cuanto más santos seamos dejaremos un mundo más humano, más hermano, más bello y saludable para futuras generaciones. Estamos invitados a asumir consecuentemente estos principios de ternura, de sensibilidad, de opción por lo bello, por lo saludable y ecológico, por la alegría, por lo bueno.

No me resisto también a creer que  habrá mucha gente que comparta estos sentimientos y que son de otros credos, de otras denominaciones, seguramente ateos que dieron  salida a su opción por el penoso testimonio que dieran del Dios del Amor los que decimos hablar del Dios de Jesucristo. No me resisto a creer que teniendo yo unos sentimientos para que los hombres y mujeres de nuestra historia que han vivido humillados por el hambre y el sufrimiento gocen de una vida feliz no haya un Amor mayor que lo haga realidad en un cielo y tierra nueva.  Creo en lo que nos oferta el Ap y habrá un día en que todos al levantar nuestras cabezas escucharemos «Al que tenga sed, yo le daré a beber gratis de la fuente de la vida». ¡Gratis! Sin merecerlo. Así saciará Dios la sed de vida que hay en nosotros” .

lunes, 30 de octubre de 2017

FUNERAL POR GERMÁN MARQUÍNEZ

El pasado sábado, día 28 de Octubre –cuando hubiera cumplido 87 años y a menos de un mes de fallecimiento en Alcalá de Henares- celebrábamos un funeral por nuestro compañero Germán Marquínez Argote. Fue en la capilla del IEME, en Ferrer del Rio 17.

Foto 1


Acompañaban a su esposa Amparo, su hijo Andrés (los otros dos residen en Colombia) y un numeroso público heterogéneo: misioneros y amigos del IEME –institución misionera a la que perteneció Germán- amigos de la familia – de España y de Colombia- y miembros y amigos de la Fundación Zubiri, que el difunto consolidó, en Bogotá y en Madrid.

Foto 2

 Y es que Germán era el gran seguidor y especialista del filósofo Zubiri. Justo en virtud de su talla intelectual tuvo un renombre especial, como catedrático y como escritor en Colombia por décadas. Todos dimos gracias a Dios por su vida, por sus enseñanzas y por poner la filosofía y el pensamiento siempre al servicio de la persona humana y de una sociedad más justa y solidaria.

                                                                                                              José Mª Rojo G.

Foto 3


MISA FUNERAL POR JOSÉ MANUEL MADRUGA Y TOMÁS ONDARRA

El lunes 23 de octubre se tuvo en la capilla de Ferrer, 17 el funeral por nuestros compañeros Tomás Ondarra y José Manuel Madruga. 


El primero que había fallecido en Julio y que por razones de vacaciones y programaciones del comienzo de curso no se había podido realizar la misa funeral. Se mantuvo conjuntamente con la de nuestro querido José Manuel, director del Departamento de Formación del IEME y exdirector  general del IEME  que fue y que como todos sabemos ha fallecido recientemente. Compañeros y muchos amigos que se encontraban en Madrid desearon asistir a la celebración que presidió José María Rojo, actual director. Concelebraron Isidoro Sánchez  y Carlos Marcilla que como José Manuel han sido directores de la EFM. 




LA EFM (Escuela de Formación Misionera) nos visita

El jueves pasado los alumnos y alumnas que están realizando el módulo actual de Misiones nos hizo una visita a nuestra casa de Ferrer, 17 acompañándolos algunos responsables de la dirección del curso. Entre los alumnos estaban laicos y religiosos y un sacerdote que emprenderán dentro de poco tareas misioneras en sus lugares de destino.


Estas visitas están programadas por la escuela para hacerse presente en lugares de referencia laicales, de religiosos y de sacerdotes diocesanos que desean incorporarse a la MIsión. Este año sólo hay un sacerdote diocesano, procedente de la diócesis de Asturias y que está residiendo precisamente en nuestra casa de Ferrer.


Se tuvieron varias actividades como la visita a las dependencias de la casa, la comida compartida y tras esta, se mantuvo un coloquio y presentación de sacerdotes diocesanos en misión. Los alumnos manifestaron su aprecio a la tarea misionera del IEME, como sacerdotes diocesanos organizados para la Misión.

El director de Misiones Extranjeras les expresó su agradecimiento a través de un "kit" de la revista  que agradecieron simpáticamente.


jueves, 19 de octubre de 2017

REVISTA ID 432



             Revista ID 432

lunes, 16 de octubre de 2017

VALENTÍA (PARRESÍA) COMO VIRTUD MISIONERA

Con este lema tan apuesto y motivador se presenta la Jornada del Domingo Mundial de las Misiones o dicho de otra forma más popular y conocido, el DOMUND que la OMP para la Propagación de la fe nos propone para este año. Un estímulo, sin duda para que “el corazón misionero de las comunidades cristianas participe, a través de la oración, del testimonio y de la comunión de bienes”, en la respuesta a las graves y vastas necesidades de la evangelización” (Mensaje para el DOMUND Papa Francisco)

  cartel

  El cartel que dinamiza la Jornada de este año es motivador. Me retrae al mundo deportivo, al mundo de las emociones dinámicas y sanas, porque toda afirmación de la valentía rompe barreras, moldes; es un mundo, de superación de uno mismo, de hazañas, de riesgo también. La sombra que corre saltando las vallas del propio lema, los horizontes del propio diseño o los colores vanguardistas y difuminados del papel que hacen que la misión se instale sin fronteras, es un perfil creyente que se apuntala con la imagen de una cruz que vuela. Quizás impulsando con su fuerza interior el propio salto de la persona que la porta, posiblemente sintiendo las evocadoras palabras del profeta Isaías “..los que esperan en el Señor verán sus fuerzas renovadas: les salen alas de águila, corren y no se fatigan, caminan y no se cansan” (Is 40,31). Esa es su pretensión, lograr que la cruz vuele, sea además signo de victoria, trampolín que impulsa el diálogo artístico entre el cartel y quien lo contempla y observa.

Alberto en Dete


No duda cabe que la Misión se vive y extiende en la medida que hay anuncio y salto a la vida. No un anuncio cualquiera, se anuncia el Evangelio, se anuncia una persona, se anuncia a Jesucristo. El mundo necesita el Evangelio de Jesucristo porque es fuente de vida, es camino de esperanza, es sueño de una sociedad más justa, más fraterna, más solidaria. Uno no se puede avergonzar de llevar este tesoro, de experimentar esta gracia, de ser conocedor de esta experiencia tan maravillosa. Por eso se nos invita a vivir este anuncio y hacerlo con valentía. De ahí el lema SE VALIENTE, LA MISIÓN TE ESPERA. 

Los cerros de Lima




Nos dice la Redemptoris Missio que “el anuncio está animado por la fe que suscita entusiasmo y fervor misionero…Los Hechos de los apóstoles expresan esta actitud con la palabra parresía que significa hablar con franqueza y valentía; este término se encuentra también en San Pablo “Confiados en nuestro Dios, tuvimos la valentía de predicaros el evangelio entre frecuentes luchas” (1 Tes 2,2) “Orando…también por mí , para que me sea dada la Palabra al abrir mi boca y pueda dar a conocer con valentía el misterio del Evangelio del cual soy embajador entre cadenas y pueda hablar de él valientemente como conviene (ef. 6,19-20)´”
Misioneros de Burgos

 No sólo es la Iglesia, como institución la que anuncia, es en razón del bautismo por lo que se nos constituye a cada uno de los bautizados en comunicadores del Evangelio. Cada cristiano ha de anunciar esta alegría no desde palabras huecas, sino desde la rúbrica de que “el Señor ha hecho obras grades con nosotros y estamos alegres” (Sal 125,3), lo ha de llevar, desde esta experiencia propia, desde la empatía que engendra el testimonio de haber acompañado la vida de la gente, sus dolores y conflictos, desde la alegría de haber ungido de fraternidad y solidaridad la soledad y las dolencias del mundo.

En R. Dominicana

 Nos dice el Mensaje del Papa para esta jornada que los jóvenes son la esperanza de la misión. Lo hemos percibido en cantidad de jóvenes lazados a la Misión en este verano. Jóvenes, varones y mujeres, de edades más tempranas y jóvenes adultos han llevado mensajes de esperanza a muchos rincones del planeta. He visto a algunos no sólo con maletas repletas para, consolar y solazar a niños y adultos en la dureza de la vida, sino con corazones repletos de sueños, de vida entregada por amor a Cristo.

Leo en Zimbabue

 Vivir en esta espiritualidad de camino, de éxodo continuo, nos dice el Papa Francisco, nos lleva a poner esta noticia alegre en las periferias que necesitan la luz del evangelio” (EG 20). Por eso este permanecer en camino nos exige estar atentos, para estar disponibles, para estar prontos y acogedores. Es una espiritualidad de la escucha y un ministerio el de la visitación. Esta sensibilidad especial requiere en los tiempos que nos han tocado vivir valentía, parresía lo llaman otros, para no esconderse, para no verse arramblados con la comodidad, con la desidia, con el hedonismo o con aquellos pensamientos que desguazan para sus intereses la dignidad del ser humano. Por eso que este año las Obras misionales pontificias nos proponen esta idea SÉ VALIENTE, LA MISIÓN TE ESPERA.