Desde el lunes 11 y hasta el jueves 14, un grupo de 8 sacerdotes procedentes de diversas diócesis españolas para reflexionar sobre "los retos de las migraciones a la misión".
Acompañados por José Luis Pinilla, secretario de la Comisión
de Migraciones de la CEE, hemos podido adentrarnos en el fenómeno migratorio y
los desafíos pastorales. El desafío migratorio con los retos que presenta en
origen, camino y destino es de un interés especial para que la Iglesia pueda
ayudar a descubrir la interculturalidad y las posibilidades de enriquecimiento
para toda la sociedad. A la realidad de las migraciones tradicionales se ha
sumado el fenómeno de los refugiados. Estamos ante una nueva identidad cultural
que se irá construyendo en función de lo que yo vaya viviendo, no solamente de
herencias puntuales del pasado.
En los testimonios hemos gozado con la presencia de Claude,
joven centroafricano que ha compartido con nosotros su viaje desde su país
hasta Melilla, a través del desierto: fronteras, armas, amenazas, mafias...
Emocionado y con lágrimas en los ojos nos ha confesado haber perdido la
familia, los amigos, su vida pasada, "ahora ya no tengo nada -nos dice-.
Solo Dios sabe por qué estoy aquí".
La eucaristía ha estado presidida por Mark Desser, misionero
en Yibuti, quien, acompañado de Anastasio Gil, director nacional de las OMP, nos
ha hecho partícipes de su trabajo y de sus inquietudes. Solamente 5 curas en la
diócesis, contando al obispo, en un medio muy mayoritariamente musulmán.
Por delante nos quedan aún expectativas como adentrarnos en
las "respuestas pastorales de la Iglesia al fenómeno migratorio",
guiados por José Luis Lastra, Delegado de Migraciones de Burgos y la visita al
centro Pueblos Unidos. Como convivencia que es, vamos encontrando momentos para
interiorizar en la amistad y compartir experiencias e inquietudes entre
nosotros. Finalizaremos el jueves con la eucaristía.
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