LA CAMPAÑA DE EPIFANÍA Y LOS CATEQUISTAS

El Día 6 de enero celebramos la fiesta de  EPIFANÍA. Una fiesta  antigua, que tuvo su origen en Oriente, para sustituir  la fiesta pagana que celebraba el solsticio de invierno en esa fecha. En Occidente, la celebración de la Epifanía data de mediados del siglo IV, que comenzó a celebrarse como Epifanía del Señor, es decir, la fiesta de la manifestación de Jesús al mundo pagano. De ahí que, el 6 de enero, Epifanía, es una fiesta esencialmente misionera.

 En España, Don Juan Sánchez, director espiritual del Seminario de Salamanca, en el Congreso de la Unión Misional del Clero, en 1946, lanzó la idea de celebrar a nivel nacional el Día anual del Seminario de Misiones Extranjeras. El Seminario diocesano de Murcia comenzó a celebrarlo en diciembre de 1946, y en breve tiempo, esta celebración se fue extendiendo por los seminarios de España

Pasan los años y en junio de 1957, la Conferencia de Metropolitanos Españoles decidió que el día 6 de enero se celebrara en adelante el “Día  anual del Seminario Nacional de Misiones Extranjeras de Burgos”. Y acuerda también “destinar al Seminario Nacional de Misiones Extranjeras de Burgos la colecta del día de Epifanía.” Desde Roma, el 15 de enero 1958, Propaganda Fide contesta al Primado de España, que no puede cambiar esa colecta, ya que en la fiesta de Epifanía se celebra en todo el mundo la colecta, instituida por el Papa León XIII a favor de las misiones africanas (Pro Afris). Insinúa la posibilidad de celebrarla a medias, para África y para el Instituto, ya que el 6 de enero se celebra también el Día del Catequista nativo. Y así se hizo.

En abril de 1958, Propaganda Fide encarga al Seminario de Misiones organizar la colecta del 6 de enero. Esa campaña y colecta, por tanto, es pontificia, porque León XIII la instituyó para ayudar a los catequistas y misiones africanas. Y en cuanto al IEME, es de la Conferencia Episcopal Española, ya que el IEME celebra su día y está encargado de llevar a cabo la colecta.

Nuestra gratitud a todos los Delegados diocesanos de Misiones y a todas las personas que aportan su esfuerzo a la realización exitosa de esta campaña.