Seguro la mayoría sabéis que el 10 de mayo honramos a ese santo, nacido en Almodóvar del Campo, Ciudad Real, el 6 de enero de 1500 y muerto en Montilla, Córdoba, el 10 de mayo de 1569. Ejerció su apostolado como sacerdote por el sur de La Mancha, Extremadura y casi toda Andalucía, especialmente en Córdoba, Sevilla y Jaén.
Su celo
sacerdotal y misionero hizo que se le considerase modelo de sacerdote y por eso
en 1946 fue nombrado
patrono del clero secular de España por Pío XII; Pablo VI lo canonizó el 31 de
mayo de 1970, siendo proclamado Doctor de la Iglesia el 7 de octubre de 2012,
junto a Santa Hildegarda de Bilden, por el papa Benedicto XVI.
En todas las
diócesis españolas se celebra esta fiesta, sobre todo entre los sacerdotes
aunque, a veces, por razones pastorales se traslade a los días vecinos al 10. Como todos los
años la casa central del IEME en Madrid se va quedando vacía. Y es que la
mayoría de los compañeros se van a sus diócesis de origen a celebrar la fiesta
del patrono, S. Juan de Avila.
El es también
patrono del IEME desde el año 1988 y hace dupla con S. Francisco Javier, el
gran misionero, que fue nuestro patrono en solitario desde siempre. En las
diócesis se suele rendir un homenaje a los sacerdotes que cumplen Bodas de Oro
y de Plata durante el presente año. Los del IEME unos estarán ahí y otros en la
misión. Allá están con 50 años de sacerdocio y a pleno pulmón:
José Jiménez Escalona, en Ciudad Real
José García Canto, asturiano y en Nicaragua
José Manuel Miranda Azpíroz, navarro y en Perú
Vidal Enrique Becerril, palentino y en Brasil
Mns. Ángel Floro Martínez, albaceteño y obispo de Gokue, en Zimbabue.
Y en sus
respectivas diócesis de origen lo celebrarán:
Joaquín Martínez Córcoles, en Albacete
José Luís García Pellejero, en Pamplona
Antonio Sánchez Eguílaz, en Castellón
Pedro Costa Vives, en Girona
Victoriano Ruíz Bueno, en Burgos.
También están
celebrando sus Bodas de Plata (y
pidiendo por otros 25 años):
Antonio Fernández Domínguez, de Orense y secretario general del IEME
Raúl Becerril Avendaño, palentino en Rpca. Dominicana y
José María Rodríguez Redondo, Burgalés en Thailandia
Nos unimos a su
acción de gracias, honramos a S. Juan de Avila y le pedimos ser fieles
seguidores de Jesús -como él lo fue- y animar y alentar siempre a esta “iglesia
en salida”, como quiere el Papa Francisco.
José
Mª Rojo G.
Director G. del IEME
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