Hemos comenzado la XI Asamblea Continental de América Latina y el Caribe. Veintiún sacerdotes del IEME nos hemos reunido en Salvador de Bahía, Brasil.
Nuestros objetivos son convivir y compartir con los misioneros del IEME que tenemos una tarea en este continente. Reflexionar sobre nuestro caminar y abrir nuevas perspectivas de futuro. En nuestra intención está el ir preparando la XII Asamblea General del IEME.
Hemos comenzado con la comida compartida y decidiendo los pasos que vamos a dar estos días. Una presentación de Brasil donde estamos. Y todo ello puesto en las manos del Espíritu Santo que acompaña este caminar. Esperamos que estos días sean un aliento de esta "Iglesia en salida" en la que todos caminamos. Durante una semana estaremos viviendo este encuentro de gracia que es la Continental del IEME para América Latina y el Caribe
¡Levántate y Anda!”
Hoy día 19, segundo día de nuestra Asamblea, hemos comenzado con un pequeño retiro. Enrique “El Peregrino”, nos ha ayudado a entrar en la situación lacerante en la que se encuentran muchas personas que viven en este continente, desde su experiencia con los “moradores da rua” en Salvador, y su Comunidad “Levántate y anda”. La misión de Jesús fue precisamente esa, hacer que los hombres y mujeres se levantaran de su postración, de su pobreza, de su marginación, de su soledad, de su vida vacía que les hace estar tirados ¿para qué vivir? Pero el rostro de Jesús, sus palabras, su vida fue toda para enderezar a toda persona curvada en sí misma.
Después de un tiempo de reflexión compartimos con Alexandre, un joven de treinta años que compartió su vida en esta comunidad. Lo importante de esta Comunidad “Levántate y Anda” es hacer personas, lo mismo que Jesús hizo durante su vida y sigue haciéndolo Dios Padre, a través de su Iglesia y de muchas personas que son capaces de entender lo que significa el amor.
La tarde y la noche fue compartir lo que nuestros grupos del IEME estamos viviendo. Escuchamos la experiencia de cada grupo. Brasil con sus dos grupos de San Pablo y Bahía, Perú, Panamá, Nicaragua, República Dominicana y Cuba. Cada uno con su realidad y sus esperanzas futuras. Terminamos compartiendo lo que los grupos de África y Asia están viviendo y la realidad de la Dirección General. Todo ello lleno de luces y sombras, pero con la alegría de la historia, del presente y de la realidad futura de una Iglesia que sigue los caminos de Jesús y sigue gritando: “¡Levántate y Anda!”
La vida es lo importante.
Este sería el resumen de este tercer día de la Asamblea Continental. Ayudados por Roberto Malvezi (Gogó), Asesor de la Conferencia Episcopal de Obispos de Brasil, hemos profundizado en la realidad brasileña y Latinoamericana.
A pesar de los grandes cambios técnicos, científicos, económicos, políticos, culturales y de la naturaleza, que aun siendo positivos dejan mucho que desear para ser humanos, tenemos que tener en cuenta que somos producto de una historia. En este Nordeste brasileño no podemos olvidar la cultura africana ni la indígena, tanto en su forma de actuar y relacionarse con las personas, la naturaleza y la religión.
En un segundo momento compartimos entre todos la realidad eclesial, lo que está significando el Papa Francisco con sus gestos y sus opciones. Descubrimos la necesidad de un cambio en las estructuras eclesiales que el Papa está alentando. Pero este cambio de las estructuras pasa por el cambio del corazón de cada uno de nosotros y especialmente por una convicción profunda de nuestros obispos y sacerdotes.
Todo el día estuvo marcado especialmente por la realidad de pobreza de nuestra sociedad brasileña, y extensible a toda Latinoamérica, y a todo el mundo. Como Jesús tuvo una opción especial por las periferias tanto económicas como existenciales. La primera Iglesia continuó los pasos de Jesús. Y hoy se pide a la Iglesia una Conversión Pastoral, y también una Conversión Ecológica. Y terminamos con la celebración de la Eucaristía. ¡Qué mejor sitio para colocar toda nuestra reflexión, trabajo y convivencia!
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