Cuando la mitad de
España está entre nieve carámbanos y
la otra mitad aterida de un frío que congela también, aparece este nuevo número
de ID para calentar la vida, no ya la de nuestros cuerpos sino la de nuestra
alma misionera. Con el corazón en ascuas el cuerpo cobra también
vida.
En tos arranques de
este nuevo año 2015 ya se oyeron
Las voces del IEME en esos días de Epifanía, cuando el día se hace fiesta y
regale. En aquel momento celebrábamos La manifestación de todo un Dios entre
nosotros, hecho misterio de Luz, cercanía y esperanza. Un gran regalo de ternura
nos envolvía con papel de celofán divino. Nos acariciaba especialmente la
esperanza para la humanidad en oscuridad, en lejanía y herida brutalmente por
desatendidos clamores de compasión.
En este número
traemos cuanta vida podemos. La
vida en realidad es más ancha y más generosa que estas limitadas páginas. El
arte de escribir es en definitiva un saber aquilatar y condensar cuanto vibra
en el corazón. Los testimonios como Las reflexiones, experiencias, reflexiones,
deseos, necesidades, etc que por estas líneas y párrafos fluyen no son otra
cosa que un resumen de vida entregada, de vida ofrecida, de vida llena de generosidad
para hombres y mujeres de todos los continentes y pueblos, lenguas
y naciones.
Que el rostro que
ofrecemos en esta portada sea la expresión de que cada vida que se entrega,
tiene rostro y nombre y con cada rostro y cada nombre hay corazón que siente,
una memoria que se hace presente y agradecimiento
que se ofrece a todos. Y ello enardece el corazón.
- Descargar: Revista ID418
0 comentarios:
Publicar un comentario